Diversos acontecimientos de gran movilización de las mujeres dieron origen a esta conmemoración y fueron marcando el camino hacia la tan deseada igualdad. En 1909 las mujeres marcharon en Nueva York reclamando la reducción de la jornada laboral, mejores salarios y derecho al voto y en 1910 en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas realizada en Copenhague se propone declarar el 8 de Marzo como Día Internacional de la Mujer.
Desde allí en adelante las mujeres han sido protagonistas de multitudinarios reclamos y también han sido severamente castigadas por llevarlos adelante. Además de reclamar iguales condiciones laborales sabemos las injustas condiciones que en el hogar han soportado relegadas a segundo plano, sin voz ni voto, sin posibilidad de decidir sobre sus hijas e hijos, sobre la economía familiar y sobre su futuro. Muchas cosas han cambiado y muchas no.
Si alguna mujer puede afirmar que nunca ha sido discriminada en el trabajo, que no se le ha exigido más, que no se la controlado mientras algún hombre “protegido” por su condición de tal no soportaba tal exigencia, forma parte de una minoría. O quizás ni siquiera advirtió esta situación, o le pareció natural.
Al interior del hogar, seguimos realizando el 75 % del trabajo, las tareas de cuidado, no remuneradas, y esto repercute en la posibilidad de realización y de autonomía, lo que nos coloca en situación de desventaja y de soportar también distintas violencias.
Los femicidios y abusos a niñas se suceden de manera alarmante, los medios los exponen y vamos perdiendo la capacidad de asombro. De otra manera no podríamos explicar la nula reacción general ante esta epidemia que se lleva una mujer cada 23 horas en nuestro país.
Las mujeres no hemos dejado de reclamar ante las injusticias, y este año se llevará a cabo el cuarto Paro Internacional de Mujeres.
Por eso Paramos y volveremos a marchar: contra toda forma de discriminación por razones de género, contra toda forma de violencia , contra la dificultad para acceder al trabajo y contra el acoso laboral, por el derecho a decidir sobre nuestro cuerpo , por la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral , porque reclamamos que todos los niveles del Estado tengan perspectiva de género ( Ley Micaela ) y que las mujeres no sean revictimizadas cuando denuncian violencias y desean proteger a sus hijas/os.
A los hombres les pedimos que apoyen, que cubran a sus compañeras de trabajo, que no tomen asistencia a las mujeres si son profesores , que se hagan cargo de las tareas domésticas el día que marchemos, ( y todos los días pero éste en especial ), que ayuden a las mujeres que los rodean para que ese día puedan marchar tranquilas y reclamar por sus derechos.
La Comisión de Género FCEIA adhiere al Paro Internacional y Plurinacional de Mujeres , Lesbianas , Bisexuales, Travestis , Trans , No Binaries, Afros, Originarias e Indígenas e invita a marchar desde Plaza Montenegro al Parque Nacional a la Bandera el lunes 9 de marzo a las 17 horas.
Ps. Adriana Gerbaudo
Coordinadora
Comisión de Género FCEIA