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Lucia Abalone y Nicolás Niz son estudiantes de la FCEIA de Ingeniería Civil e Ingeniería Industrial respectivamente y en la actualidad son la máxima autoridad de las asociaciones nacionales que nuclean a quienes estudian dichas carreras. La Asociación Nacional de Estudiantes de Ingeniería Civil (ANEIC) y la Asociación Argentina de Estudiantes de Ingeniería Industrial (AArEII) realizan anualmente diversos congresos y actividades con el objetivo de ser un complemento en la formación de los/las alumnos/as de las facultades de todo el país. 

“En ANEIC lo que promovemos es que los propios estudiantes se involucren en su proceso educativo; no dejar que el único responsable de nuestra educación sea el sistema educativo sino encontrar esa mejor versión de futuro profesional  o de persona que queremos ser cuando tengamos el título. Nosotros observamos ciertas falencias o cosas que queremos aprender y no las encontramos en la facultad entonces este es el medio que tenemos de generar esos espacios para aprender con diferentes actividades” indicó Lucía quien ejerció el cargo de presidenta de la Asociación durante todo 2019 finalizando su mandato a fin de mes.

Foto 4Por su parte Nicolás, quien será el presidente de AArEII hasta agosto de 2020 expresó: “Buscamos complementar la carrera de ingeniería industrial porque hay áreas, como por ejemplo todo lo que son habilidades soft o blandas que en algunas facultades no se ve o se ve muy poco, hay algunas que tienen un enfoque más mecánico y no ven casi nada lo que es relaciones humanas. Nuestro objetivo principal es tratar de aprender todo lo que no se ve en la universidad, por eso en los eventos abordamos mucho lo que es liderazgo, coaching y metodologías ágiles”

Para alcanzar el puesto de máxima autoridad, ambos realizaron primero un extenso recorrido dentro de las asociaciones. Lucía fue en 2017 delegada de la FCEIA, todas las facultades de ingeniería civil de Argentina cuentan con delegados en ANEIC; en 2018 fue vocal comenzando a formar parte de la comisión directiva compuesta por 12 integrantes de diferentes universidades del país y en 2019 llegó al cargo de presidenta. 

Nicolás se sumó a AArEII ni bien comenzó a cursar ingeniería industrial, el primer año participó de las Jornadas Simultáneas de Estudiantes de Ingeniería Industrial (JoSEII) que se realizan de manera local dos veces al año y al año siguiente ya participó del Congreso Nacional, en el periodo agosto 2017- agosto 2018 fue representante de la FCEIA  y luego segundo vocal titular ocupando uno de los cargos de comisión directiva. En agosto de este año la Asamblea General lo eligió como presidente siendo el más joven en la historia de la Asociación con sólo 21 años.AArEII

Ambos resaltaron la importancia de participar de estas actividades e invitaron a las/los estudiantes a que se sumen para que vivan su propia experiencia. “Yo les diría que vayan a un congreso porque está buenísimo, cuando recién arrancas la carrera es muy difícil darte cuenta qué es la ingeniería civil porque todo el tiempo está en papel, en un libro, en un ejercicio, en cambio en los congresos hay visitas técnicas y talleres que te permiten ver qué es realmente” mencionó Lucía y agregó “allí pueden pasar dos cosas, que realmente descubras que te gusta o que quizás te sirva también para decir ‘esto no era lo que yo pensaba’. Mi recomendación es que se acerquen a participar de una actividad para conocer mejor la carrera”. 

El alumno de industrial coincidió en que participando de las diferentes actividades que organizan desde la asociación es posible conocer más de qué se trata la carrera sobre todo durante los primeros años  cuando “ves todas materias de cálculos, física, química y muy pocas de específicas de la carrera”. “Para quienes están comenzó AArEII es una forma de poder interiorizarse un poco más, te motiva a seguir estudiando porque decís ‘quiero ser como tal que conocí en la visita a tal empresa’, a mi me ayudó a terminar de enamorarme de la carrera; para mi AAreII es como un motor” expresó su presidente.

Nicolás también buscó desmitificar algunas cuestiones que observan desde la asociación: “siempre se piensa que AArEII te ocupa mucho tiempo o está la excusa de ‘soy muy chico, el año que viene arranco’ y esos son mitos. El tema de tiempos es muy subjetivo, yo al principio también lo pensaba pero cuando entré vi que cada uno hace lo que puede, si te comprometes con una tarea la tenés que cumplir pero si estás corto de tiempo esa semana no te comprometes; algo que te enseña AArEII que es muy valioso es a organizar tus tiempos. Por otro lado el decir ‘soy muy chico’, lo escuche muchas veces y creo que no hay un momento ideal para arrancar, si estás en primer o quinto año desde los dos lugares podes aportar”.

A modo de reflexión final y a pocos días de finalizar su mandato Lucía indicó: “Sin duda es una experiencia fuera de lo común, uno cuando se mete en este tipo de actividades, creo yo, nunca está preparado, nadie sabe bien lo que hay que hacer sino que es una experiencia en la que uno va a aprendiendo. Una de las cosas lindas que tiene este tipo de asociaciones es la posibilidad de equivocarte, cuando sos profesional te equivocas y se te cae el edificio. Acá todavía estamos aprendiendo, se aprenden muchas cosas de lo que se llaman ciencias blandas, lo que es el liderazgo y formar un equipo de trabajo. Es una experiencia que te aporta muchas herramientas, y si bien como presidente tenés más responsabilidades, en cualquiera de los cargos se aprende todo este tipo de habilidades.”

El presidente de AArEII también hizo una valoración sobre su paso por la Asociación y lo que significa para él ser la máxima autoridad: “Creo que es la experiencia más verosímil a un gerenciamiento que una persona puede tener a tan temprana edad; te abre un montón de puertas, te crea una red de contactos increíble, conoces gente de todas partes del país. Me está dejando un montón de enseñanzas e experiencias inolvidables, aprendo constantemente, sin dudas el Nico que arrancó en AArEII hace un par de años es totalmente distinto al que está ahora” cerró. 

Más información sobre las asociaciones

- AArEII

- ANEIC

 

Para ella, es necesario trabajar contenidos conceptuales, procedimentales, actitudinales,  contenidos ligados a la ciencia de la educación, la historia y filosofía de la ciencia, para mostrar a las y los  estudiantes que la ciencia es viva. “Tenemos la impresión de que la física y la matemática no cambian, pero es sólo una ilusión. En la física, por ejemplo, trabajamos constantemente con nuevas tecnologías, incursionamos nuevos estudios, la ciencia evoluciona todo el tiempo”, destacó Beatriz Salemme. De acuerdo a su experiencia, se necesita una enseñanza diferente, no una enseñanza tradicional.
La especialista brasilera en Didáctica de la Enseñanza resaltó la importancia de que los docentes de los distintos niveles estén preparados, también, para adaptarse a los cambios generacionales y cuenten con las herramientas para que sus clases respondan a las nuevas demandas de los estudiantes. 
“Todos los años cuando recibo un grupo de alumnos que se que van a estar 5 años en la universidad para después salir al mundo del trabajo, me propongo como desafío pensar ¿qué mundo les espera de aquí a cinco años? ¿Cómo va a ser esa nueva generación de profesionales?” indicó Beatriz convencida de que año tras año son diferentes los objetivos que debe plantearse. “Tenemos el desafío de formar profesionales de otra generación” destacó.
La especialista en educación valoró la importancia de contar siempre con diferentes opciones metodológicas que permitan explorar distintas técnicas según el grupo con el que se esté trabajando. “A veces percibo con tristeza que muchos profesores dicen ‘yo enseño, si ellos aprenden es otro problema’ y no es así, es mi responsabilidad como docente que los estudiantes comprendan. Entonces nuestro gran desafío es estar alerta para encontrar la forma de que nuestros alumnos de hoy se interesen por lo que se está explicando”.
Entre las herramientas que utiliza en el aula es el trabajo con películas en las que se aborden temas de interés para ser tratados desde diversas disciplinas. Así por ejemplo, con uno de sus grupos de estudiantes de secundaria tomaron una escena del “Código Da Vinci” en la que aparece un código en formato de una secuencia de Fibonacci. “Tomando esa secuencia también trabajamos con su profesor de biología, conversamos con el profesor de historia, la profesora de física. El abordaje fue integral”, relató la especialista en educación.
 
“A mí me enseñaron cierta información de una manera puntual pero nos tenemos que dar cuenta que somos de otra época. A veces las personas no perciben la importancia del cambio generacional y hay que comprender que la enseñanza es un proceso dinámico que se retroalimenta” concluyó Beatriz.