El Reactor RA-4 de la FCEIA se destaca en la escena nuclear argentina por ser uno de los más importantes en cuanto a su actividad de formación de estudiantes. Por eso, desde la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) realizaron esta nota en la que recorren sus actividades y antecedentes.
El reactor escuela de la CNEA funciona dentro de la Universidad Nacional de Rosario, donde se realizan prácticas profesionalizantes de distintas especialidades de ingeniería y también se desarrollan tareas de investigación en el área nuclear.
A fines de la década del 60, Argentina comenzaba a proyectar una central nuclear en la zona del Gran Buenos Aires y el Litoral, por lo que iba a ser necesaria la construcción de instalaciones apropiadas para la formación de personal altamente especializado en las nuevas áreas nucleares. Fue así que en 1968 la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) firmó un convenio con el Gobierno de la República Federal de Alemania para instalar en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) un reactor nuclear de investigación de baja potencia.
Hasta el día de hoy, el RA-4 continúa siendo una instalación fundamental para el entrenamiento de operadores de las centrales nucleares Atucha y también para la formación de estudiantes de las diferentes especialidades de ingeniería de la UNR. También allí se desarrollan distintas tareas de investigación en el área nuclear.
Características técnicas
El RA-4 Siemens SUR 100 –que funciona dentro del Instituto de Estudios Nucleares y Radiaciones Ionizantes (IENRI) de la Facultad de Ciencias Exactas (FECIA) de la UNR– es un reactor nuclear térmico con núcleo sólido homogéneo, de potencia máxima 1W, de los denominados “de potencia cero”. Esto significa que trabaja normalmente a potencias muy bajas, por lo que no necesita de un sistema de refrigeración, ya que el calor producido en el núcleo es relativamente bajo.
Su potencia es tan baja, que el núcleo del RA-4 es cien mil millones de veces más chico que el del reactor de la Central Nuclear Atucha I. El recipiente que contiene al núcleo es una coraza de grafito y plomo, y agua con boro, que actúa como gran absorbente de neutrones.
El reactor llegó desde Alemania en julio de 1971 y en septiembre se puso en marcha en el Centro Atómico Constituyentes, comenzando así el entrenamiento del personal de la UNR. Fue trasladado a Rosario en octubre de 1972, y desde entonces opera con total normalidad. En 2016 se reacondicionó por completo su sala de control.
Actividades académicas
Al ser un reactor escuela y estar inserto dentro de una universidad, la principal actividad del RA-4 se orienta al entrenamiento y capacitación de estudiantes avanzados de distintas ramas de ingeniería, buscando integrar la tecnología nuclear en estas carreras. Puntualmente, en el reactor los alumnos pueden realizar sus prácticas profesionalizantes, requisito necesario para poder recibirse.
Sin embargo, el reactor también tiene vinculación con otras carreras de la UNR, permitiendo que estudiantes de física, bioquímica y medicina –que tienen una vinculación indirecta con el reactor y que normalmente no tendrían acceso a este tipo de instalaciones– también puedan entrar en contacto con la tecnología nuclear.
Por otro lado, los estudiantes secundarios de escuelas técnicas también son bienvenidos en el RA-4. Este año, por ejemplo, un alumno de la Escuela de Educación Técnico Profesional Nº485 “Vicecomodoro Marambio” de Villa Gobernador Gálvez, realizó una práctica profesional con modalidad pasantía en el IENRI de 100 horas de duración.
Dentro del ámbito académico, el RA-4 se usa además para la investigación, instrucción, entrenamiento de operadores de reactores, y para estudiar sistemas para experimentos nucleares y de reactores. También cumple su función de difusión y divulgación a través de un programa de visitas, donde se reciben a estudiantes de la UNR y de otras universidades de la región, además de público general.